By Ricardo Lezama 
El pasado jueves, en un operativo conjunto de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la Guardia Nacional, fue capturado Mario Alexander ‘N’, conocido como ‘El Piyi’, en la colonia Jardines de Santa Fe, en la ciudad de Culiacán, Sinaloa. Esta acción representa un importante golpe al crimen organizado en México. Las entidades seles busca unir formalmente aunque este operativo indica que sus actividades ya están llevadas en conjunto.
‘El Piyi’ es reconocido como el jefe de seguridad de los hermanos Iván y Alfredo Guzmán Salazar, hijos de Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán Loera, quienes son líderes de una de las facciones del Cártel de Sinaloa. Tras su detención, ‘El Piyi’ fue trasladado al Penal del Altiplano, en el Estado de México, donde enfrentará cargos penales.
Además de ser considerado un operador clave del cártel, ‘El Piyi’ también formaba parte de la célula conocida como “Los Ninis”. Aunque su perfil era bajo, se le atribuía la responsabilidad de coordinar operaciones cruciales para la organización criminal. Se destacaba por su uso constante de pasamontañas para evitar ser identificado.
Luis Chaparro, un experto en temas de seguridad, comentó que ‘El Piyi’ había manifestado intenciones de abandonar el Cártel de Sinaloa tras la captura de otro miembro, conocido como “El Nini”. Esta información añade un nuevo giro a las dinámicas internas del cártel.
La captura de ‘El Piyi’ no es un avance significativo en la lucha contra el narcotráfico en México, sino que también subraya los esfuerzos de las autoridades para desmantelar las estructuras de los ‘Chapitos’ en Culiacan, Sinaloa y sus operaciones en el país.