Con mismo riesgo, médicos de México ganan 14 veces menos que en EU

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El Senado aprobó en 2019 una reforma a la Ley General de Salud para fortalecer los derechos laborales de los médicos residentes que tienen el sueldo más bajo; sin embargo, persisten sus salarios precarios.

INFORMADO.MX

En medio de la crisis por el COVID-19, los salarios del personal de salud en México son más bajos que en otros países. Aquí perciben 22 mil dólares brutos al año en promedio en los sectores público y privado, lo que significa tres veces menos de lo que ganan los médicos de Brasil (58 mil) y España (63 mil). Y en Estados Unidos cobran hasta 14 veces más (313 mil dólares), según el Informe de Compensación de Médicos 2019, elaborado por el portal especializado Medscape y retomado por el Instituto Belisario Domínguez del Senado de la República.

El Instituto recuerda que el Plan Nacional de Salud 2019-2024 contempla la regularización de 87 mil trabajadores sin contrato. “Tan sólo en este año se tiene previsto basificar a 17 mil 274 empleados de salud, entre los que destacan dos mil 539 médicos, mil 356 enfermeras, 841 paramédicos y 799 administrativos”, indica el diagnóstico.

El Senado aprobó en 2019 una reforma a la Ley General de Salud para fortalecer los derechos laborales de los médicos residentes que tienen el sueldo más bajo, para que recibieran mejores remuneraciones y prestaciones; sin embargo, persisten sus salarios precarios.

Además, los médicos y enfermeras están siendo discriminados, por lo que el titular de la Secretaría de Salud Federal, Jorge Alcocer, pide que se les respete. “El trabajador de la salud recibe esas agresiones debido a la angustia de la gente. No tiene razón alguna el que se les considere una fuente especial de contagio, no son fuente de propagación”, refiere.

Enfermeras y residentes denuncian mayor riesgo por el mismo salario

  • Por el peligro de contagios y las agresiones padecidas en las últimas semanas, piden más protección y estímulos económicos

Además de las agresiones externas, personal médico en el país trabaja en condiciones salariales precarias, pese a una mayor exposición al COVID-19, debido a las fallas en los protocolos y los insumos de protección.

El ingreso mensual promedio de trabajadores de enfermería es de nueve mil 909 pesos, ubicándose hasta la posición 39, según el Observatorio Laboral de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social en México.

Por otra parte, la percepción también es menor para los médicos residentes. En 2019, miembros del Senado de la República indicaron que había residentes que recibían hasta siete mil pesos mensuales, mientras que la Asamblea Nacional de Médicos Residentes (ANMR) mencionó que el promedio osciló entre nueve mil 500 y 14 mil pesos mensuales dependiendo el grado. 

En Jalisco, enfermeros y residentes denuncian que ahora su trabajo representa más riesgo, pero no se les compensa ante la emergencia sanitaria. Por ejemplo, un residente de pediatría en el Hospital General de Occidente, conocido como Zoquipan, destinado para los pacientes con el virus, señala que no hay protocolos adecuados en la recepción y derivación de enfermos, principalmente en las tardes y noches. “Si el paciente llega grave lo tenemos que recibir como residentes porque no hay adscritos de medicina en la noche… y es el turno más largo, donde más nos hacemos responsables de lo que suceda. Eso pasa en todas las especialidades. Somos la mano de obra barata del hospital, nos exponemos el triple y compramos nuestro propio equipo”, sostiene el joven, quien pidió el anonimato para evitar represalias.

Una residente que también solicitó omitir su nombre concuerda en la falta de insumos. Dice que del hospital les dieron cubrebocas, pero los aditamentos –como gafas de protección, caretas o guantes–  los compraron ellos, quienes gastaron mil pesos cada uno. 

Por su parte, una enfermera expone que no todos reciben el mismo equipo y que los traen en varias áreas. Y otro enfermero que está en la zona para atender COVID-19, ubicada en el cuarto piso, apunta que sí les dieron equipo de protección, pero no les han mencionado sobre la aplicación de las pruebas para descartar contagios. “Nos sentimos expuestos. Llevamos aquí tres semanas, nadie se ha enfermado, pero de todas maneras queremos que nos hagan una prueba, así como a las enfermeras que trabajan con pacientes con cáncer les hacen pruebas”.

PROFESIONES

Las que más ganan

  • La medicina es la tercera profesión mejor pagada en México. 
  •  En el primer lugar se encuentra la carrera de finanzas, con un ingreso mensual promedio de 17 mil 377 brutos (sin reducir impuestos). 
  • En segundo sitio está la química, con 16 mil 156 mensuales.
  • En cuanto al personal de enfermería, su ingreso mensual promedio es de nueve mil 909. Está en la posición 39 de las profesiones mejor pagadas.

Faltan material y capacitación

La Asamblea Nacional de Médicos Residentes publicó el pasado 16 de abril los resultados de la “Segunda Encuesta Nacional de Médicos en Formación Expuestos al COVID-19”, que documenta carencias principalmente en materiales y capacitación para el personal en formación.

El cuestionario fue dirigido a mil 457 estudiantes de la carrera de Medicina, médicos internos, pasantes de servicio social y residentes que se encuentran laborando en instituciones de salud dentro del territorio mexicano. Del total, 41% es pasante, 34% es residente, 22% es interno y 3%, estudiante. Participaron 66 personas de Jalisco.

Por tipo de hospital, 52% pertenece a instituciones de la Secretaría de Salud, 33% al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), 8% al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), 3% a las clínicas privadas y 4% en otro tipo de unidad.

De los encuestados, 56% refirió que su hospital ya es centro para atender COVID-19; de éstos, la mitad está en las áreas críticas para la atención de pacientes con el virus. 

Sobre cuántos trabajadores tienen el material necesario para ejercer su labor, 93% respondió que no lo tiene y 7% dijo que sí. Resaltaron que no hay áreas de aislados para pacientes infectocontagiosos, oxígeno portátil para traslado de pacientes, termómetros y bolsas de residuos infectocontagiosos.

Sobre cuántos encuestados han recibido capacitación para hacer frente a la contingencia, 89% comentó que no y 11% contestó que sí. 

Por último, 54% consideró que ellos y su hospital o clínica estaban preparados ante la pandemia y 46% respondió que no estaban listos.

Piden mejor administración 

Un enfermero que trabaja en el área de COVID-19 del Hospital General de Occidente considera que hace falta una mejor administración en el manejo de la pandemia, ya los jefes dan órdenes distintas sobre un mismo tema y el personal se confunde.

Por ejemplo, subraya que unos les piden que usen mascarillas desechables y otros los cubrebocas N95, los cuales sí ofrecen protección contra partículas. “Hay material suficiente, pero no está siendo bien administrado”.

Además de lidiar con burocracia, enfatiza, en las tres semanas que llevan en el área han recibido otros aditamentos. Y cuidan mucho el contacto con los confinados. “El traje se utiliza para el contacto directo. Una vez que entras a ver al paciente lo haces con más cuidado. Los enseñamos a usar los cubrebocas y tenemos mucho cuidado. Estamos cansados por la carga de trabajo,  pero seguimos adelante”.

Añade que hasta el momento han tratado a dos pacientes que se confirmó que tuvieron el virus, pero ya fueron dados de alta. “Otros ingresan con diagnósticos de neumonías atípicas, pero si el paciente se muere dicen que es por neumonía… esto ocurre por la falta de las pruebas, que es lo que necesitamos en el servicio”.

Los enfermeros que están en el espacio para COVID-19 “perciben un salario adecuado, aunque no les dan bonos extra por trabajar en área de riesgo. En el hospital hay las contrataciones de gente por dos mil pesos para trabajar 15 días, pero  hay enfermeras federales que hacen las mismas actividades y ganan más. No hay una equidad en salarios”.

Lineamientos 

  • El lineamiento para la atención de pacientes por COVID-19 recomienda que los hospitales preparen la recepción de pacientes con síntomas respiratorios: área de identificación y priorización, localización externa o interna, así como áreas alternas para su ubicación.
  • Además de alistar áreas de revisión con medidas de aislamiento por gotas o contacto, preparación de zonas de aislamiento de contacto en espacios arquitectónicos definidos y señalizados, preparación del personal médico, de enfermería, de vigilancia epidemiológica, de control de infección (limpieza), de ingeniería biomédica y mantenimiento, además de técnicos en inhaloterapia, paraclínicos, camilleros y administrativos, tomando en cuenta el potencial ausentismo. 
  • La preparación del personal debe considerar ampliamente la capacitación y el reclutamiento.

Comparativo salarial entre los médicos

Fuente: Promedios del sector público y privado. Análisis del Instituto Belisario Domínguez con información de Medscape.

LAS CARENCIAS

Reportes de los trabajadores

  • Faltan áreas de aislados para pacientes infectocontagiosos.
  • Requieren de más oxígeno portátil.
  • Faltan termómetros y bolsas de residuos infectocontagiosos.

Fuente: Segunda Encuesta Nacional de Médicos en Formación Expuestos al COVID-19.

LA CIFRA

730 mil

Personal que falta en el área de enfermería en México

DÉFICIT

Rezago

La Secretaría de Salud Federal dio a conocer que México tiene un déficit de 123 mil médicos generales y 72 mil especialistas.

CLAVES

Las necesidades

Infraestructura

La mayoría de las personas considera que la prioridad en una ley para mejorar los servicios públicos de salud es construir más clínicas y hospitales, seguido de la promoción de una cultura de prevención y detección oportuna, equipar instalaciones para una mejor atención de pacientes y garantizar medicinas gratuitas, según la Encuesta Nacional sobre la Cultura de la Legalidad y Agenda Legislativa 2019.

Déficit

La Secretaría de Salud del Gobierno federal dio a conocer en julio de 2019 que México tiene un déficit de 123 mil médicos generales y de 72 mil especialistas.

Respeto

Pese a las agresiones recientes, la Encuesta sobre la Percepción Pública de la Ciencia y la Tecnología revela que la enfermería es la tercera profesión más respetada por la población mexicana, mientras que la medicina es la quinta con mayor respetabilidad.

TESTIMONIOS

Reciben amenazas 

Familiares de pacientes sospechosos de COVID-19 han hostigado y amenazado a trabajadores de la salud porque no pueden pasar a las áreas restringidas, comenta un residente del Hospital General de Occidente, conocido como Zoquipan. “A un compañero lo amenazaron con matarlo a la salida, a nosotros en piso también nos han amenazado”, menciona un médico, quien prefiere no dar su nombre por seguridad. 

Aunque ya han recibido agresiones con anterioridad, éstas se acentuaron desde el inicio de la pandemia.

El joven menciona que el protocolo establece que los pacientes con dificultad respiratoria deben enviarse a un área especial. En el turno de la mañana las derivaciones se realizan de forma correcta, pero en la tarde y en la noche, que es cuando más llegan usuarios, no cumplen con el criterio.

Eso propicia que se contaminen otras áreas, como urgencias, en donde se deben mantener a los pacientes aislados hasta que reciban el resultado de su prueba.

Para disminuir la exposición al virus, pide mejorar el cumplimiento de los protocolos y que se contrate más personal en áreas críticas. 

Explica que el área destinada para el virus, ubicada en el cuarto piso, tiene médicos generales contratados para la derivación, aunque a veces no hay personal en todos los turnos. “Yo no tengo problema para venir al hospital, siempre y cuando me den mi equipo y protección. Yo tengo familia. Me baño en el hospital y me cambio… y llego a la casa y también me cambio de ropa, me baño y me duermo en cuarto separado”.

En contraste, un médico que recién comenzó a laborar en el área exclusiva para COVID-19, cuenta que les llegan los pacientes de forma directa, por lo que de momento no enfrenta dificultades.

Percibirá 15 mil 500 pesos quincenales por ser un trabajo de “alto riesgo”, indica.

En un recorrido realizado por este medio se constató que a la entrada del hospital están unas huellas azules pegadas en el suelo, las cuales tendrían que seguir los ciudadanos que tengan síntomas; sin embargo, en la entrada no se comunica al respecto ni se toma la temperatura, sino que solamente aplican gel antibacterial.

REGISTRAN AGRESIONES

  • Personal médico de todo el país ya denunció agresiones. La Comisión Interinstitucional de Enfermeras del Estado de Jalisco, que aglutina a 27 instituciones públicas y privadas, reportó en marzo que varias de sus integrantes fueron atacadas por parte de camioneros, taxistas, vecinos y demás ciudadanos ante el temor a la pandemia del coronavirus. 
  • Incluso, ese tipo de acciones propiciaron que diferentes Gobiernos estatales, como los de Jalisco, Veracruz o Morelos, habilitaran un transporte público gratuito para este sector.
  • Entre los últimos ataques registrados fue el de un enfermero al que le aventaron café caliente. Tras el hecho, que ocurrió en la Ruta 178 en la metrópoli, la empresa Transportes El Salto anunció que el personal médico podría acceder a todas las rutas de la compañía de manera gratuita.

LA VOZ DEL EXPERTO

Severine Durin (investigadora del Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social). 

Atentan contra los que cuidan 

Severine Durin explica que las agresiones contra el personal médico son consecuencia de la violencia machista que impera en México, en contraste con otros países, donde cada día se aplaude y reconoce el trabajo del personal de salud.

Detalla que la “violencia cultural” deriva en “violencias directas”, como las agresiones físicas en contra de los trabajadores, muy particularmente hacia las enfermeras, al rociarles cloro cuando salen de sus domicilios o en el transporte público.

“Expresan no solamente el miedo al contagio y a morir, son la expresión visible de la desvalorización del trabajo de cuidado, así como de las personas que lo realizan: las enfermeras y, por extensión, de todas las personas cuidadoras”.