El secretario general de la ONU, António Guterres, advirtió este martes, sobre el estado crítico del mundo actual, al declarar que “el estado de nuestro mundo es insostenible” y que “no podemos seguir así”. 

Tres grandes males que afectan al mundo

A través de su mensaje emitido durante la apertura de la semana de Alto Nivel de Naciones Unidas, Guterres aseguró que la humanidad enfrenta tres grandes flagelos: la impunidad, que afecta a los principales conflictos contemporáneos como en Gaza, Líbano, Ucrania o Sudán; la creciente desigualdad, que se agrava tanto a nivel internacional como dentro de los propios países; y la incertidumbre, que abarca la amenaza del cambio climático y el descontrol sobre la inteligencia artificial (IA).

En este contexto, el secretario subrayó que aunque los problemas globales no son imposibles de resolver, su análisis es negativo. “Los retos a los que nos enfrentamos no son irresolubles”, señaló, pero añadió que la realidad actual pinta un panorama desalentador.

Impunidad en los conflictos globales

Respecto a la impunidad, Guterres lamentó el creciente número de países que, según él, sienten que pueden violar la carta de la ONU y las leyes internacionales humanitarias sin enfrentar consecuencias. “Invadir otro país, devastar sociedades enteras o ignorar olímpicamente el bienestar de su propia población” es, en palabras del secretario, una situación cada vez más común.

Haciendo referencia al conflicto en Gaza, el secretario cuestionó el futuro de Israel y la comunidad internacional tras la guerra, preguntando: “¿Cómo puede aceptar el mundo el futuro de un Estado (Israel) que incluye un gran número de palestinos sin ninguna libertad, derechos ni dignidad?”. Esta afirmación fue recibida con aplausos cuando agregó que “nada puede justificar el castigo colectivo en Gaza”.

Desigualdad en aumento

Guterres también hizo hincapié en la alarmante desigualdad, afirmando que no se trata simplemente de una cuestión técnica o burocrática, sino de poder profundamente arraigado en la historia. Explicó que en los últimos años esta situación empeoró significativamente, informando que “un 1 % de los habitantes del mundo posee el 43% de los activos financieros del planeta”. 

Asimismo, denunció que muchos gobiernos optan por otorgar regalos fiscales a grandes empresas y a los ultrarricos, en detrimento de las inversiones en salud, educación y protección social.

Un futuro sin combustibles fósiles

En cuanto a las incertidumbres del futuro, el secretario general destacó la necesidad de abandonar los combustibles fósiles, indicando que aunque un futuro sin ellos es seguro, la transición no lo es. Según Guterres, muchas empresas petroleras siguen acumulando fortunas enormes gracias a subsidios, mientras la población paga los costos de la catástrofe climática. “La transición rápida no lo es”, enfatizó.

El desafío de la inteligencia artificial

Finalmente, el secretario alertó sobre los riesgos que plantea una inteligencia artificial sin control. Aunque reconoció que la IA transformará todo lo que conocemos, expresó dudas sobre la dirección que tomará: “¿Hacia más libertad o hacia más conflicto?, ¿hacia un mundo más sostenible o una mayor desigualdad?”. Subrayó que unas pocas compañías concentran un enorme poder sobre esta tecnología, lo que podría llevar a lo que él llamó “la Gran Fractura”, si no se implementa un control global efectivo.