El presidente del Senado de la República, Gerardo Fernández Noroña, manifestó su firme rechazo hacia la propuesta de reforma electoral promovida por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo. La iniciativa, que busca eliminar los cargos de representación proporcional en el Congreso de la Unión, generó una intensa discusión debido a su impacto en la composición legislativa, dejando únicamente a legisladores electos por voto popular.
Durante una transmisión en vivo a través de Facebook, el senador por Morena expresó su preocupación al respecto, calificando de “barbaridades” las ideas que justifican esta reforma. A su juicio, la eliminación de los plurinominales demuestra un desconocimiento profundo de la historia electoral del país y de los esfuerzos realizados para democratizarlo.
“Eso abrió a las minorías, que eran todos: el PAN, el Partido Comunista, todos los partidos de oposición […] quienes hablan de eliminar a los pluris están diciendo barbaridades porque no conocen la historia electoral del país, no conocen la historia por la democratización del país, no conocen lo que ha costado ese tipo de cosas”, enfatizó Noroña.
Según lo explicado por Fernández Noroña, la representación proporcional fue un pilar esencial para permitir la entrada de partidos de oposición al Congreso durante los años de hegemonía del Partido Revolucionario Institucional (PRI). Este sistema, agregó, posibilitó que fuerzas políticas tradicionalmente marginadas tuvieran una voz en el ámbito legislativo.
Contexto de la reforma
En este sentido, la reforma de Claudia Sheinbaum busca modificar de manera drástica la composición del Congreso de la Unión, eliminando 200 diputados y 64 senadores plurinominales. Como resultado, la Cámara de Diputados quedaría integrada únicamente por 300 legisladores, mientras que el Senado tendría 64 miembros electos por mayoría relativa.
Por otro lado, esta iniciativa también propone eliminar la reelección de diputados y senadores, así como de regidores y concejales en los gobiernos municipales. De acuerdo con la presidenta, el objetivo es garantizar el principio de “sufragio efectivo, no reelección” y combatir prácticas como el nepotismo.
En este contexto, Sheinbaum argumentó que la eliminación de los plurinominales y la reelección busca impedir que algunos perfiles acumulen décadas en el poder mediante movimientos estratégicos entre distintas cámaras legislativas. Actualmente, algunos legisladores han logrado mantenerse en funciones por hasta 20 años gracias al sistema vigente.
Críticas y preocupaciones
Por su parte, Fernández Noroña señaló que, a pesar de las intenciones declaradas, esta reforma podría limitar gravemente la representación de las minorías y debilitar el pluralismo en las instituciones legislativas. De acuerdo con su análisis, la historia demuestra que el sistema de plurinominales ha sido crucial para abrir espacios políticos a partidos pequeños y a sectores de la población que, de otra manera, permanecerían excluidos.
“Hablar desde el prejuicio y la despolitización es un error que puede costar muy caro”, añadió el senador, refiriéndose a la necesidad de valorar el contexto histórico y los costos que la implementación de estas medidas podría implicar para el país.
En este marco, la reforma está prevista para ser discutida en el próximo periodo de sesiones, junto con otras iniciativas pendientes desde la administración de Andrés Manuel López Obrador. Esta discusión se anticipa como uno de los temas más polémicos en el Congreso, ya que podría redefinir las reglas del juego político y afectar directamente a las dinámicas democráticas de México.