Un juez federal de Rhode Island falló a favor del gobierno de Donald Trump, permitiendo que se mantenga la retención de fondos destinados a cubrir los costos de alojamiento para migrantes en Nueva York. Dichos fondos, enviados por la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA), estaban destinados a asistir a la ciudad en la gestión de la llegada de migrantes, quienes han aumentado significativamente en la región.
Según lo dictaminado por el juez federal de distrito, John McConnell, la medida de retener los fondos no está sujeta a una orden vigente que busca evitar una interrupción generalizada de la financiación federal bajo la administración de Trump. McConnell indicó que no se requería mayor aclaración sobre los fundamentos legales presentados por los demandados, quienes defendieron la congelación de los fondos en base a los “estatutos, normas y términos autorizadores aplicables”. De este modo, la solicitud de una audiencia de emergencia fue desestimada, y la orden de restricción temporal que impide la congelación de los fondos se ratificó.
Cabe mencionar que, este fallo se produce en un contexto tenso que se vio intensificado cuando Elon Musk, director del Departamento de Eficiencia Gubernamental, acusó en la plataforma “X” que los fondos destinados a emergencias estaban siendo mal utilizados para financiar “hoteles de lujo” para migrantes. Musk justificó estas declaraciones asegurando que su equipo había identificado esta irregularidad como parte de los esfuerzos del gobierno federal por reducir costos y disminuir el personal.
Al respecto, funcionarios del Departamento de Seguridad Nacional también actuaron rápidamente, despidiendo a cuatro empleados federales que presuntamente eludieron la dirección para realizar las transacciones relacionadas con los pagos cuestionados. Estos pagos no son nuevos, ya que forman parte de un programa que ha estado vigente durante años para cubrir los costos derivados del aumento de migrantes. No obstante, este programa ha sido objeto de controversia por la cantidad de dinero destinado a estos fines.
Por su parte, el administrador interino de FEMA, Cameron Hamilton, señaló en documentos judiciales que la administración republicana optó por retirar fondos del Programa de Refugio y Servicios debido a sospechas sobre su vinculación con “actividades ilegales” en algunos de los hoteles utilizados para albergar migrantes, particularmente en Manhattan. El Hotel Roosevelt, que Nueva York arrendó en 2023 como centro de recepción para migrantes sin hogar, fue uno de los puntos clave de la disputa. Este establecimiento, que había estado cerrado desde 2020 por la pandemia, ahora sirve tanto como un refugio temporal como un punto de acceso a servicios para cientos de familias migrantes.
De acuerdo con la legislación de la ciudad de Nueva York, el gobierno local está obligado a ofrecer refugio a cualquier persona que lo necesite. Sin embargo, dado el alto número de migrantes que han llegado, el sistema de refugios regular se vio desbordado, lo que llevó a las autoridades a recurrir al Hotel Roosevelt como una solución temporal.
Por otro lado, Hamilton explicó que el gobierno federal tiene la autoridad para suspender o cancelar los pagos si se demuestra que los beneficiarios no cumplen con los requisitos establecidos. La FEMA solicitó a las autoridades locales más información sobre la gestión de estos fondos, con el fin de asegurar que no se estén utilizando para actividades ilícitas.
En cuanto al Programa de Refugio y Servicios, cuya financiación proviene del Congreso y es administrado por FEMA, también es duramente criticado por sectores republicanos. Estos afirman, de manera incorrecta, que el programa está desviando fondos que deberían destinarse a víctimas de desastres naturales, como huracanes e inundaciones, afectando a quienes más lo necesitan.