Joaquín Guzmán López Foto: DEA

La captura de Ismael “El Mayo” Zambada, líder y fundador del famoso Cártel de Sinaloa, el pasado 25 de Julio ha sido un gran éxito para las autoridades, llevando a cabo una cuidadosa y meticulosa operación encubierta por parte del FBI. Durante mucho tiempo, Zambada ha sido uno de los criminales más buscados por el Gobierno estadounidense, y su detención ahora puede significar un gran punto de inflexión en la lucha contra el narcotráfico en México.

El arresto de Zambada tuvo lugar de manera simultánea con la captura de Joaquín Guzmán López, hijo de su antiguo socio y líder del Cártel de Sinaloa, Joaquín “El Chapo” Guzmán. Ambos fueron detenidos el 25 de julio en El Paso, marcando así un importante golpe para las autoridades estadounidenses que durante mucho tiempo han seguido de cerca las actividades delictivas de este peligroso dúo en el narcotráfico.

A sus 76 años, Zambada tenía una recompensa activa de alrededor de 15 millones de dólares por parte del Gobierno estadounidense, lo que demuestra la importancia que tenía en el mundo del narcotráfico y la magnitud de sus crímenes. Se enfrentará a múltiples cargos en Estados Unidos por dirigir las operaciones delictivas del Cártel de Sinaloa, incluyendo la fabricación y tráfico de fentanilo, la droga altamente adictiva y letal que esta causando millones de muertes al año en todo el mundo.

Esta captura no solo es significativa por la detención de un líder del cártel, sino que también marca un posible punto de inflexión en la dinámica del narcotráfico en México. Durante mucho tiempo, el Cártel de Sinaloa ha sido uno de los más poderosos e influyentes en el país, y la captura de su líder podría provocar cambios importantes en la estructura y estrategia de la organización.

El Mayo Zambada: El esquivo capo del cartel de Sinaloa

Ismael “El Mayo” Zambada García es un líder en la sombra por excelencia. Es una de las figuras más poderosas y enigmáticas del mundo del narcotráfico. Como cofundador del Cártel de Sinaloa, había logrado evadir su captura durante décadas mientras mantenía un bastión en el tráfico internacional de drogas. El Mayo ha estado profundamente involucrado en el tráfico de drogas desde la década de 1970. Su alianza con el infame Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera ha dado forma al panorama del crimen organizado en México y más allá, presentando desafíos significativos tanto para los gobiernos mexicanos como estadounidenses.

La alianza Zambada-Guzmán

El Mayo Zambada y El Chapo Guzmán, dos de los narcotraficantes más conocidos de la historia, unieron fuerzas para formar una fuerte alianza dentro del Cártel de Sinaloa. Esta alianza fue la clave para la creación de una de las organizaciones criminales más poderosas del mundo, y se basó en una combinación de respeto mutuo, experiencia, recursos y conexiones.

Mientras El Chapo se hacía famoso por sus dramáticas fugas de prisión y capturas de alto perfil, El Mayo trabajaba en las sombras, dirigiendo estratégicamente las operaciones logísticas y financieras del cártel. Su habilidad para establecer sofisticadas rutas de contrabando y su influencia para infiltrarse en varias capas del gobierno y las fuerzas del orden, fue fundamental para el éxito del cártel.

Su alianza le permitió al Cártel de Sinaloa expandir su alcance, establecer sofisticadas rutas de contrabando e infiltrarse en varios niveles del gobierno y de las fuerzas del orden. Esta alianza había demostrado ser resistente, incluso ante la captura y extradición de El Chapo a los Estados Unidos.

El papel de El Mayo: Zambada era el cerebro detrás de la amplia red de casas de seguridad, rutas de envío y flujos financieros del cártel.

El papel de El Chapo: Por otro lado, El Chapo era el encargado de manejar las negociaciones con cárteles rivales y las fuerzas gubernamentales, así como de enfrentar cualquier amenaza contra el cártel. Sus tácticas agresivas y operaciones de alto perfil lo convirtieron en una figura temida y respetada en el mundo del narcotráfico.

Corrupción

Pero nada de esto hubiera sido posible sin la corrupción del gobierno que plagaba al país. Con sobornos generosos, el cártel se aseguraba de que sus drogas pasaran sin problemas y que la ley mirara para otro lado. Su lema era simple pero efectivo: “plata o plomo”. O aceptabas el dinero o te enfrentabas a las balas.

Arrestos estratégicos

Cuando El Chapo fue arrestado, muchos pensaron que no era coincidencia. Algunos creían que estos arrestos en realidad beneficiaban a ciertas personas dentro del cártel, como El Mayo, ayudándole a tomar más control. Es como si incluso las capturas fueran parte de un plan mayor.