Marilyn Cote: La historia de una impostora que prometía curar la depresión en 7 días

En las últimas semanas, el nombre de Marilyn Cote ha resonado en redes sociales y medios de comunicación tras revelarse que esta conocida “doctora” mexicana no cuenta con las credenciales necesarias para ejercer la psiquiatría, como afirmaba en sus plataformas y consultorio. Diversas publicaciones en redes sociales expusieron supuestas evidencias que indican que, en realidad, Cote es abogada y no tiene formación médica. Sin embargo, durante años construyó una imagen de especialista en neurociencias y psiquiatría, alegando poseer títulos de prestigiosas instituciones como Harvard y la Universidad de Oslo.

De acuerdo con las denuncias en redes sociales, la mujer abusaba de las personas que llegaban a ella como pacientes, pues los diagnosticaba y medicaba de manera riesgosa. Así lo denuncian testimonios como el de Alitzel García, quien compartió su experiencia en una publicación viral:

“Yo busqué atención con la doctora en 2019 y 2020. Durante un año acudí de manera presencial tanto a sus talleres grupales como a consulta individual. Me dio un diagnóstico erróneo y me mantuvo con altas dosis de antipsicóticos sin presentar mejoría, cambiándolos a su conveniencia sin esperar el tiempo para ver sus efectos”, aseguró Alitzel.

Imagen de internet

Asimismo, Cote promocionaba su clínica “Neuropsychology Clinic Marilyn Cote” y afirmaba que podía “curar la depresión en siete días y la ansiedad en menos de una semana”. Se respaldaba, supuestamente, en una trayectoria internacional que incluía colaboraciones con instituciones de renombre y especialidades avanzadas en neurociencias. No obstante, su falta de credenciales médicas fue evidenciada cuando se detectó que los números de cédula en sus recetas y la documentación mostrada en sus redes no correspondían a registros válidos de psiquiatría.

Según registros oficiales, Cote cuenta con estudios legales en México: se graduó en Derecho por la Universidad Autónoma de Puebla en el año 2000, completó una maestría en Criminalística en 2012 y, en 2015, obtuvo un doctorado en Psicología. Si bien tiene cédulas profesionales válidas para estas disciplinas, ninguna le autoriza a ejercer la psiquiatría ni a recetar medicamentos controlados.

Además, las acusaciones apuntan a que Cote se presentó como miembro honorario y exdirectora del Centro de Desórdenes Mentales de la Universidad de Oslo y usó nombres y logotipos de Harvard en su sitio web, aunque estos datos no han sido confirmados por las instituciones mencionadas.

De igual manera, la falsa especialista promovía su “clínica” como un centro de salud mental prestigioso; incluso usaba el nombre del hospital “Fifty Doctors”, pero la propia entidad hospitalaria negó cualquier vínculo y advirtió sobre acciones legales en su contra:

“Procederemos en contra de dichos ilícitos, tomando las medidas correspondientes para interponer las reclamaciones judiciales y administrativas necesarias”, aseguraron en un comunicado.

Como consecuencia de estas acciones, el Fiscal General de Puebla, Gilberto Higuera Bernal, anunció que se abrirá una investigación para determinar las responsabilidades penales de Cote, quien podría enfrentar cargos de usurpación de funciones y fraude. De ser hallada culpable, Cote enfrentaría hasta seis años de prisión.

Además, la Cofepris acudió al consultorio de Cote y decidió clausurarlo de forma definitiva. Según indica un comunicado, los funcionarios de la comisión constataron en la visita que “el establecimiento no contaba con aviso de funcionamiento, licencia sanitaria, ni la certificación académica del personal, necesaria para llevar a cabo los servicios que ofrece”.

Por otra parte, la cantante italiana Laura Pausini también se vio involucrada indirectamente cuando surgieron en redes fotos de ella junto a Cote. Pausini aclaró no conocer a Cote en un mensaje a sus seguidores:

“Mucha gente me está preguntando eso. No tengo idea sinceramente de quién es, pero veo en su página algunas fotos conmigo. ¡Quizás es una fan! ¿Por qué todo el mundo me pregunta eso? ¿Me pueden explicar qué está pasando con esta señora?”.

Finalmente, es importante mencionar que el caso salió a la luz cuando la cuenta de X “Charlatanes Médicos”, que expone a personas que se presentan como profesionales de la salud sin contar con las autorizaciones legales, alertó sobre las irregularidades en las credenciales de Marilyn Cote. Esta cuenta evidenció en imágenes las recetas firmadas por Cote con numeraciones de cédula no válidas y diagnósticos sin base profesional.