Durante la entrevista con la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, en sus oficinas del Zócalo. Foto José Antonio López

Miguel Ángel Velázquez|La Jornada

Ciudad de México. Ni cómplices ni represores. La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, se compromete a entregar a la ciudadanía la mejor policía del país. En eso estamos, y advierte que esta semana estará listo el protocolo policial para que no vuelva a ocurrir un episodio de violencia y saqueo como el del viernes 5 de este junio.

Claudia Sheinbaum sabe lo que es recorrer las calles en son de protesta: a los 15 años marchaba para exigir el freno a la violencia y el esclarecimiento del destino de los jóvenes desaparecidos de la mano de doña Rosario Ibarra de Piedra, pero asegura que esas protestas eran pacíficas y tenían reivindicaciones claras.

Y frente a la violencia que los jóvenes embozados que saquearon e hicieron destrozos en algunas calles de la ciudad, la jefa de Gobierno anuncia la creación de un cuerpo especial metropolitano. Tenemos una policía que estamos transformando, fuerzas de seguridad que estamos transformando para dejar atrás vicios de corrupción y abuso policial. Queremos construir una policía a la altura de los habitantes de la Ciudad de México.

Fue una tarde de rabia y encono esa del 5 de junio; una joven de 16 años fue golpeada en el suelo por un par de policías en las inmediaciones de la representación del estado de Jalisco en la Ciudad de México, pese a que había órdenes de no reprimir, por lo que fueron acusados ante el Ministerio Público. Poco antes, los jóvenes de vestimenta negra destrozaron el mobiliario urbano sobre Paseo de la Reforma, agredieron a periodistas destacados a la cobertura del hecho y trataron de incendiar algunos inmuebles. La noche cayó con saldo de 11 heridos. Melanie, la muchacha golpeada por los uniformados, salió del hospital al que fue llevada a la mañana siguiente en buen estado de salud.

–La irrupción de los grupos anarquistas, o que se hacen llamar así, han provocado sicosis en ciertos sectores de la sociedad, un persistente problema en las redes sociales y una corriente en la opinión pública que considera que la ciudad ha sido permisiva, cuando no cómplice de esta gente.

–Nos querían colocar en una trampa. Estaban buscando que la policía reprimiera y se mostró al final que no era un movimiento social, sino que era otra cosa lo que buscaban, ya sea porque están vinculados a grupos del conservadurismo del país o porque al final su actuación los liga con ellos, pero nosotros teníamos que actuar de la mejor manera.

–Está claro que esos grupos anarquistas buscan provocar una reacción de la autoridad. Disfrazan objetivos políticos con la campaña global antirracista y el movimiento antipoliciaco, encontrando eco en los adversarios y críticos de la 4T.

–Sí, estos grupos lo que buscan, en asociación con grupos conservadores, es una especie donde demuestren, entre comillas, que el gobierno, que representa parte de este movimiento de transformación, en particular el de esta ciudad, es represor, y eso nunca lo van a tener, porque nosotros no somos eso y ellos lo que están buscando, precisamente, es un esquema donde muestren esto, ya sea, repito, en coordinación con estos grupos de conservadores o promovidos por estos grupos o por una acción que, al final, pues se junta con esta necesidad de estar mostrando cosas que no son.

“Nosotros tenemos que ser muy cuidadosos porque lo que estamos buscando, particularmente, como proyecto de ciudad, es una de derechos por encima de todo, y esos son los grandes derechos sociales, incluido el derecho a la cultura, pero también el derecho a la manifestación, el derecho a la libre expresión. Por eso se está transformando a la policía, y en esa construcción estamos todos los días. Pueden decir que la policía no actuó de una manera u otra, pero lo que no pueden decir es que no estamos construyendo la mayor policía que pueda tener nuestro país, y que en esa perspectiva será una policía que sí atienda la inseguridad de la ciudad, pero al mismo tiempo que esté orientada hacia una policía que defienda los derechos humanos, porque hemos visto escenas en otros muchos países, en muchas ciudades del mundo, de abuso policial, que no queremos que ocurran en esta ciudad.

Y así vamos a seguir trabajando para tener una policía que contenga, que haga uso razonado de la fuerza y que no viole los derechos humanos, y ahí, esa es parte de la historia de la ciudad, de cómo se construyó. Tenemos que estar a la altura de las circunstancias y en eso vamos a trabajar más todos los días.

–Bueno, ahora que hablas del uso razonado de la fuerza, lo que vimos en las manifestaciones recientes fue el uso razonado de la no intervención. Vemos el saqueo y parece que la policía se vuelve cómplice.

–No, sí ha habido detenciones por la fiscalía de personas que han violentado a periodistas en las manifestaciones. Sí hay detenciones. Podríamos haber actuado de manera distinta, es muy probable, y en eso estamos trabajando, porque nosotros vamos hacia una ciudad donde no haya impunidad, en todos los sentidos, pero también una policía que sepa actuar y no caiga en provocaciones, porque a lo que nos estaban orillando en ese momento era una provocación.

La jefa de Gobierno advierte conductas de gobierno que ella rechaza: “Hay quien tiene la tentación autoritaria por el uso del poder y la utiliza con cualquier oportunidad, y en nuestro caso es todo lo contrario. Estamos en la lucha por las libertades y la justicia.

“Soy heredera de un movimiento estudiantil, por generación y por mis padres, mi madre en particular, heredera del movimiento del 68, que se vivió como represión.

“Por eso, cuando entro al gobierno de la ciudad, lo primero es desaparecer el cuerpo de granaderos como cuerpo represor, que finalmente ese fue su origen, pero eso no significa que no debe haber una policía que también tenga labores de contención frente a circunstancias como las que hemos vivido. Pero una policía preparada para la contención, eso es muy distinto, muy distinto.

Entonces, un cuerpo de seguridad que atienda a la seguridad, a la justicia, a la paz que tiene que existir en la ciudad, en particular en la situación de inseguridad en la que encontramos la Ciudad de México.

–Parece que no se ha podido avanzar en la inteligencia policial, no se le ha visto.

–Sí, sí hay labores de inteligencia, pero sobre todo se ha orientado al tema del combate a la delincuencia. Se trata de que la inteligencia funcione para disminuir el delito y acabar con lo que afecta a la ciudadanía en la vida cotidiana, que son los delitos de alto impacto, ahí es donde está concentrada.

“Entonces, como dijimos, el objetivo es construir una ciudad de derechos, de libertades y al mismo tiempo tener una policía que tenga diálogo abierto, y cuando no hay diálogo, tener un policía que –en el marco de los derechos humanos y del uso razonado de la fuerza–, esté capacitada para atender de la mejor forma a ésta… a este esquema en el que se mueven estos llamados grupos anarquistas, siempre dentro de un esquema donde el abuso policial no sea permitido, pero que podamos tener protocolos de contención que eviten el abuso, y por otro lado contengan esta situación dentro del marco del uso de la fuerza en los derechos humanos.

Destaca labor de Ateneas 

“En ese sentido, pocas veces se menciona el comportamiento de las Ateneas –que estuvieron en este último episodio–, este grupo de mujeres preparadas de la policía de la Ciudad de México que se ha estado capacitando y formando, y el resultado es cómo han venido actuando y la contención que han hecho. Realmente se ha hablado muy poco de ellas y hay que hacerles un reconocimiento por no caer en el abuso policial y al mismo tiempo contener la violencia.

Entonces, y en este caso, así como las Ateneas, la idea es conformar la policía metropolitana como un cuerpo especial que nos ayude en este proceso.

En el rostro de Claudia Sheinbaum se mira un gesto de alivio cuando habla de las Ateneas y del grupo especial en formación, y deja sellado su compromiso:

El protocolo del que estamos hablando con la Comisión de Derechos Humanos de la ciudad tiene que estar listo en esta semana, y después la capacitación y la formación de los cuerpos que se convertirán en la mejor policía del país.

By astar