Este lunes, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó que a partir de mañana se implementará un arancel del 25% a todos los productos importados desde México y Canadá. Esta nueva medida, que entra en vigor el martes, forma parte de la política económica proteccionista que ha marcado el gobierno de Trump.
En una intervención en la Casa Blanca, Trump dejó claro que no habrá espacio para la negociación con ambos países: “No hay margen para México ni para Canadá, no. Los aranceles están listos y entran en vigor mañana”, afirmó el mandatario. Esta declaración llega después de que su secretario de Comercio, Howard Lutnick, anunciara que Trump aún debía tomar la decisión final sobre los aranceles, lo que generó incertidumbre en los días previos.
De acuerdo con el presidente, además de los aranceles a México y Canadá, a partir de mañana también se aplicará un gravamen adicional del 10 % sobre las importaciones provenientes de China, lo que incrementará la carga arancelaria total sobre los productos chinos al 20 %. Este nuevo paso es parte de la estrategia económica que Trump ha llevado a cabo desde su primer mandato (2017-2021), en el que ya se habían impuesto aranceles sobre más de 300.000 millones de dólares en productos provenientes de China, muchos de los cuales aún se mantienen vigentes.
La lucha contra el fentanilo, una justificación clave
Trump justificó estas medidas al señalar la grave crisis sanitaria relacionada con el tráfico de fentanilo, un potente opiáceo responsable de miles de muertes en Estados Unidos cada año. En sus declaraciones, destacó: “Enormes cantidades de fentanilo han entrado en nuestro país desde México y, como saben, también desde China, donde se envía a México y a Canadá”. De esta manera, el presidente vinculó directamente la droga con los países vecinos de EE. UU., subrayando que la amenaza proviene principalmente de México y Canadá.
Asimismo, Trump afirmó que los aranceles beneficiarían a la industria manufacturera estadounidense, especialmente al sector automotriz, el cual ha sido perjudicado por la deslocalización de empleos a otros países debido a acuerdos comerciales como el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN). En este sentido, destacó: “Será muy costoso aprovecharse de este país, robarnos el dinero, los empleos, nuestras fábricas y negocios, y esperar no ser castigados. Están siendo castigados con aranceles. Es un arma muy poderosa”.
Impacto en los mercados y la reacción de Wall Street
Como resultado de esta confirmación, los mercados financieros de Nueva York experimentaron pérdidas significativas. Según los datos finales de la jornada, el índice Nasdaq, con una fuerte concentración de empresas tecnológicas, fue el más afectado, cayendo un 2,64 %. En paralelo, el S&P 500 disminuyó un 1,76 %, y el Dow Jones de Industriales retrocedió un 1,48 %. Estos descensos reflejan el impacto económico de las medidas anunciadas por Trump, que ya habían sido anticipadas, pero cuyo retraso en su implementación había generado expectativas sobre una posible modificación.
Cabe recordar que, en un principio, Trump había amenazado con aplicar estos aranceles el 4 de febrero, sin embargo, decidió posponer su aplicación un mes después de que México se comprometiera a desplegar 10.000 miembros de la Guardia Nacional en su frontera con Estados Unidos. Además, Canadá implementó medidas adicionales, como el nombramiento de un “zar del fentanilo”. Sin embargo, a pesar de estos esfuerzos, las negociaciones mantenidas la semana pasada entre delegaciones de ambos países y el equipo de Trump no lograron resultados satisfactorios, lo que derivó en la imposición definitiva de los aranceles.