Colombia aplica la reducción de la jornada laboral semanal
El gobierno de Colombia ha tomado una medida innovadora para reducir la semana laboral de todos los trabajadores, privados y públicos, de 48 a 42 horas semanales, equiparándolas a las normas de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
La nueva ley, conocida como Ley 2101 de 2021, fue recibida con júbilo entre los trabajadores colombianos, muchos de los cuales han estado luchando con largas jornadas y bajos salarios. Con la nueva ley, sus horas diarias se han reducido de 8 a 7, mientras que las horas semanales se han reducido de 48 a 47 en una primera etapa y finalmente a 42 horas. Esto también aportará más estabilidad económica a muchos de los trabajadores colombianos, pues ya no tendrán que hacer horas extraordinarias ni cubrir las ausencias de sus compañeros.
El gobierno ha advertido a las empresas que si no cumplen la nueva legislación podrían enfrentarse a sanciones. Los empresarios del sector privado pueden negociar con los sindicatos de sus empleados y hacer cambios en la jornada laboral para garantizar el cumplimiento de la nueva ley. Sin embargo, hay algunas excepciones, como cuando los contratos de trabajo contienen turnos de trabajo que no superan las seis horas diarias ni las 36 semanales.
Además, los empresarios tienen prohibido reducir el salario de sus trabajadores en función de la jornada reducida, según el artículo 4 de la ley de 2021. Los trabajadores independientes tampoco están exentos; el artículo 18 de la Ley 1122 de 2007 establece que están obligados a cotizar al Sistema de Seguridad Social el 40% del valor de sus ingresos mensuales.
Para los trabajadores que consideren que sus empleadores están violando la ley, aún tienen la opción de presentar un despido indirecto. Esto significa que pueden dimitir unilateralmente si se descubre que su empleador infringe la legislación. En tal caso, también podrían tener derecho a recibir una indemnización.
La nueva legislación es una gran ayuda para los trabajadores que han tenido que soportar largas jornadas y que ahora podrán disfrutar del descanso y la estabilidad económica que conlleva una semana laboral más corta. Es un importante paso adelante para la población trabajadora de Colombia y podría sentar un precedente para otras naciones de la región en lo que se refiere al tratamiento de los empleados.