Malta, una pequeña isla mediterránea conocida por sus encantadores paisajes y su comunidad unida, ha sido sacudida por un feminicidio. El pasado sábado, el cuerpo de Sandra Milena Ramírez, una querida profesora colombiana, fue encontrado en su apartamento de la localidad de Sliema. Llevaba varios años viviendo en la isla y era muy apreciada por sus compañeros y clientes de la tienda local donde trabajaba.
Sandra, descrita como una mujer devota de fe y una oradora talentosa, había abandonado su país natal en busca de un futuro mejor. Su muerte ha dejado un profundo vacío en su comunidad de amigos, conocidos y familiares.
El presunto autor del feminicidio, Fabián García de nacionalidad colombiana, se entregó a la policía y confesó ser el autor del asesinato. Cuando las autoridades llegaron al lugar encontraron a la víctima con heridas de arma blanca. Sin embargo, en una audiencia judicial el lunes, el hombre decidió declararse inocente y negar los cargos en su contra.
La noticia de la muerte de Ramírez ha conmocionado a la comunidad colombiana, tanto en Malta como en su ciudad natal. Amigos y vecinos la recuerdan como una mujer dedicada y ambiciosa que siempre tuvo una visión positiva de la vida. La comunidad latinoamericana en Malta, de la cual Ramírez era un querido miembro, también se ha visto profundamente afectada por su muerte. Con más de 1.000 miembros, la comunidad se solidariza con su familia y ofrece su apoyo en todo lo que pueden.
Colombia ha luchado durante mucho tiempo contra altas tasas de feminicidio, y este desgarrador incidente sirve como recordatorio de la importancia de abordar este problema. La comunidad colombiana en Malta exige justicia para Sandra Ramírez.