By Ryan Hansen 
La popularidad de las aplicaciones de citas como Tinder, Blumble y Hinge ha transformado drásticamente el panorama del romance. Sin embargo, a pesar de su creciente uso, también se ha notado un aumento en la insatisfacción con estas plataformas. Muchos usuarios expresan sentirse desilusionados con la experiencia, afirmando que las “conexiones” que se encuentran en estas aplicaciones son superficiales y vacías.
Antes de la llegada de las aplicaciones de citas, conocer a alguien nuevo requería esfuerzo y compromiso. Se necesitaba dedicar tiempo, energía y usar habilidades sociales para iniciar y mantener una conversación cara a cara. Con estas nuevas plataformas, esta dinámica ha cambiado drásticamente, ofreciendo a los usuarios la posibilidad de encontrar posibles parejas con un simple desliz de dedo. Sin embargo, esta simplificación también ha traído consigo una nueva forma de pereza social.
El esfuerzo de las citas en línea
Uno de los principales problemas que los usuarios mencionan es el esfuerzo que implica encontrar una conexión significativa. Con una gran cantidad de perfiles disponibles, es común que los usuarios tengan que pasar por al menos cinco citas con desconocidos, gastando tiempo y dinero antes de encontrar a alguien con quien compartan intereses comunes. Este proceso puede ser agotador y desalentador, especialmente cuando las expectativas no se cumplen.
Para algunos, estas aplicaciones representan una sociedad distópica, donde las relaciones significativas son cada vez más difíciles de encontrar. Los argumentos en contra de estas plataformas virtuales incluyen la falta de prácticidad y la exposición no deseada a discusiones políticas o ideológicas en una primera cita, así como también la preocupante representación tóxica de la masculinidad.
A pesar de estas críticas, muchos usuarios consideran que las aplicaciones de citas son fundamentales en las relaciones modernas, ya que las demandas laborales y los desplazamientos pueden invadir su tiempo personal. Además, se podría argumentar que ya existían obstáculos en las relaciones tradicionales y por eso las aplicaciones de citas y las plataformas en línea se están convirtiendo en el principal espacio donde las parejas se conocen.
Integración de la Inteligencia Artificial
Reconociendo estos desafíos, muchas aplicaciones de citas están comenzando a integrar la Inteligencia Artificial (IA) para mejorar la experiencia del usuario. La IA se está utilizando para identificar posibles perfiles falsos, mensajes de acoso y estafas. creando un entorno más seguro y amigable para todos. Además, estas plataformas están explorando cómo la IA puede reforzar los algoritmos de coincidencia, haciendo coincidir a los usuarios con perfiles que sean más compatibles con sus intereses y personalidades.
Podría decirse que ya existen obstáculos en las relaciones formadas tradicionalmente. Mientras la tecnología avanza, las aplicaciones de citas y las plataformas online se están convirtiendo en el principal espacio donde se encuentran las parejas. Si bien el debate continúa, está claro que estas plataformas están desafiando las normas sociales y al mismo tiempo remodelándolas.