El mundo conmemora 80 años de la liberación de Auschwitz: un recordatorio de memoria y compromiso

Este lunes, el mundo honra el 80.º aniversario de la liberación de Auschwitz, el campo de exterminio nazi más conocido, con actos de memoria en Polonia, donde un grupo de sobrevivientes, cada vez más reducido, se reunió para recordar a las víctimas del Holocausto.

Según se pudo observar, en una emotiva ceremonia, los sobrevivientes, acompañados por el presidente polaco Andrzej Duda, depositaron flores en el Muro de la Muerte, lugar donde los prisioneros eran ejecutados. Muchos de ellos vestían gorras y pañuelos con rayas azules y blancas, símbolos de los uniformes que usaron durante su reclusión. Encendieron velas al pie del muro y tocaron su superficie en silencio, rindiendo tributo a los millones que perecieron.

Un evento con enfoque en los sobrevivientes

La ceremonia principal, programada para las 16:00 GMT, reunió a líderes de todo el mundo, entre ellos los presidentes de Francia y Alemania, el rey Carlos III del Reino Unido y el ministro de Educación de Israel.

“Este año nos enfocaremos en los sobrevivientes y su mensaje”, explicó Pawel Sawicki, portavoz del Museo de Auschwitz. Añadió que, a diferencia de años anteriores, “no habrá discursos de políticos”.

En entrevistas previas con AFP, los sobrevivientes hicieron un llamado a preservar la memoria para cuando ya no haya testigos vivos. Al mismo tiempo, expresaron su preocupación por el resurgimiento del odio y el antisemitismo en el mundo.

Asimismo, Sawicki advirtió que esta conmemoración marca la última oportunidad para reunir a un grupo significativo de sobrevivientes. “Todos sabemos que en 10 años no será posible tener un grupo grande para el 90.º aniversario”, señaló.

El peso de la memoria en las nuevas generaciones

Por su parte, antes de asistir a la ceremonia, el rey Carlos III destacó la importancia de la memoria tras la desaparición de muchos sobrevivientes. “La responsabilidad de la memoria recae mucho más sobre nosotros y las generaciones futuras”, afirmó.

Este compromiso se hace urgente en un contexto global donde el antisemitismo y los discursos de odio muestran un preocupante auge.

Un símbolo del Holocausto y la barbarie nazi

Construido en 1940 por la Alemania nazi en Oswiecim, Polonia, Auschwitz se convirtió en el epicentro del genocidio que costó la vida a seis millones de judíos europeos. Los primeros prisioneros, 728 polacos, llegaron el 14 de junio de ese año.

En enero de 1945, con el avance del Ejército Rojo, los nazis obligaron a 60.000 prisioneros a caminar hacia el oeste en la llamada “Marcha de la Muerte”. Entre el 21 y el 26 de enero, destruyeron cámaras de gas y crematorios antes de retirarse. El 27 de enero, las tropas soviéticas liberaron a los 7.000 prisioneros que permanecían en el campo. Como consecuencia, ese día fue declarado por la ONU como el Día Internacional en Memoria de las Víctimas del Holocausto.

Testimonios para que la historia no se repita

Cerca de 40 sobrevivientes relataron sus experiencias a AFP en entrevistas realizadas en diferentes países, como Israel, Polonia, Rusia, Argentina, Canadá y Sudáfrica.

“¿Cómo pudo el mundo permitir Auschwitz?”, se preguntó Marta Neuwirth, de 95 años, desde Chile. Tenía 15 años cuando fue deportada al campo desde Hungría.

Mientras que Julia Wallach, a punto de cumplir 100 años, lucha por narrar lo sucedido sin lágrimas. “Es muy difícil hablar de eso”, confesó la sobreviviente parisina, quien se salvó en el último momento de ser enviada a la cámara de gas en Birkenau. A pesar de su dolor, prometió seguir compartiendo su testimonio mientras pueda.

Otro caso conmovedor es el de Esther Senot, de 97 años, quien regresó recientemente a Birkenau acompañada de jóvenes franceses. Cumplió así una promesa hecha a su hermana Fanny en 1944, quien le pidió con su último aliento: “Cuenta lo que nos sucedió (…) para que la historia no nos olvide”.