En un drama legal que se está desarrollando, el reconocido cantante mexicano Natanael Cano se encuentra envuelto en una controversia, enfrentando cargos de soborno presentados por la Procuraduría General de Justicia del Estado de Sonora. Conocido por sus “corridos tumbados”, Cano fue acusado oficialmente el 19 de agosto por un incidente que se remonta al 29 de marzo.

Las acusaciones surgen de una noche en la que Cano, como se muestra en los videos que él mismo publicó, fue sorprendido conduciendo a exceso de velocidad en Hermosillo. Cuando los oficiales lo detuvieron, él supuestamente los sobornó ofreciéndoles dinero a cambio de eludir las sanciones legales que normalmente conlleva el exceso de velocidad. La Procuraduría General de Justicia de Sonora actuó en este incidente y la Policía de Hermosillo retiro de sus puestos a los oficiales involucrados.

Cano publicó posteriormente un video en las redes sociales en el que afirmó que ya había pagado la multa y expresó su disposición a disculparse personalmente con el comisionado de Hermosillo. Tras esto, la Fiscalía de Sonora inició una investigación y meses después se presentaron cargos formales. Aunque existe una medida cautelar para evitar que Cano sea encarcelado, sus problemas legales están lejos de terminar. Sigue atado al proceso judicial, que le impide salir del país sin la aprobación de un juez y le exige presentarse ante el tribunal cada dos meses.

A pesar de sus enredos legales, la carrera de Cano no se ha detenido por completo. Está programado que aparezca en la pelea Floyd Mayweather vs. Gotti III en la Arena CDMX el 24 de agosto, lo que indica que sus compromisos profesionales inmediatos no se verán afectados.

Tanto los fanáticos como los críticos están observando de cerca para ver cómo los problemas legales de Cano afectarán su trayectoria profesional. Por ahora, el cantante camina sobre la cuerda floja, equilibrándose entre su creciente carrera y el espectro inminente de las consecuencias judiciales.

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