Estibadores paralizan puertos en EE.UU.: “Las máquinas no alimentan familias”

Este martes, decenas de miles de estibadores en los principales puertos de la costa este y el golfo de México, en Estados Unidos, se declaran en huelga para exigir mejores condiciones laborales frente a los avances de la automatización. 

“Quieren automatizar todo, están quitando el empleo de las personas, levantándolo con máquinas”, expresó Juan Domínguez, uno de los estibadores en protesta, mientras los manifestantes se concentran en los accesos al Puerto de Miami.

Según lo informado, el conflicto surge después de que alrededor de 47,000 estibadores, afiliados al sindicato International Longshoremen’s Association (ILA), rechazaran una propuesta de la patronal US Maritime Alliance (USMX), que incluye un aumento salarial del 50%. Sin embargo, los trabajadores aseguran que sus demandas van más allá del salario, enfocándose en el riesgo que representa la automatización de los puertos para sus empleos. 

De igual manera, se dio a conocer que la huelga afecta a puertos clave como Nueva York, Nueva Orleans, Houston y Baltimore, paralizando entre el 43% y 49% del comercio marítimo estadounidense. Como resultado, casi la mitad del comercio marítimo del país se encuentra paralizado, afectando gravemente las operaciones portuarias.

“Las máquinas no alimentan familias”, se lee en los carteles que portan los estibadores durante las manifestaciones, que están acompañadas de canciones icónicas como “Born in the USA”, en un ambiente de resistencia.

Además, un análisis de JPMorgan muestra que cada día de paro podría generar pérdidas de hasta 5,000 millones de dólares, siendo los sectores de bienes de consumo, energía y automotriz los más afectados. Por lo tanto, se estima que solo el cierre del puerto de Houston podría costar 100 millones de dólares diarios en importaciones y exportaciones.

“Los trabajadores portuarios desempeñarán un papel esencial para que las comunidades obtengan los recursos que necesitan”, afirmó el presidente Joe Biden, quien expresó su apoyo a los trabajadores y descartó el uso de la Ley Taft-Hartley para forzar su regreso al trabajo.

Finalmente, es importante señalar que, aunque las negociaciones avanzan a paso lento, la automatización de los puertos sigue siendo una de las principales preocupaciones para los estibadores. Pues temen que esta tendencia tecnológica provoque la pérdida de miles de empleos.