El presidente de Colombia, Gustavo Petro, se refirió este miércoles a la deportación de migrantes ilegales desde Estados Unidos y la comparó con el traslado de prisioneros a los campos de concentración durante la Segunda Guerra Mundial. Sus declaraciones se dan en el marco de la reciente crisis diplomática con Washington, tras la negativa del gobierno colombiano a recibir dos vuelos con deportados.
Comparación con la Alemania nazi
Durante su intervención, Petro afirmó que las deportaciones deben analizarse en su contexto y cuestionó la forma en la que Estados Unidos expulsa a los migrantes.
“Del episodio con Trump (…) hay una serie de lecciones que hay que aprender, de ellos y de nosotros. De ellos, supongo, que no tienen que sacar esposadas a las personas que desean sacar de su propio país”, señaló el presidente.
Asimismo, estableció un paralelismo con la Alemania de 1943 y el uso de trenes para el traslado masivo de personas hacia los campos de concentración.
“Allá habrá una discusión política, por ejemplo, si no están repitiendo el mismo error de los alemanes en 1943 porque usaban los trenes y las líneas férreas para llevar vagones enteros repletos de judíos, socialistas y comunistas para el campo de concentración”, agregó el presidente colombiano.
Origen del conflicto con Washington
El desacuerdo entre ambos gobiernos inició cuando Petro anunció en la red social X que Colombia no permitiría el ingreso de dos aviones con migrantes deportados desde Estados Unidos. Según el mandatario, el hecho de que llegaran esposados vulneraba su dignidad.
Como respuesta, el expresidente Donald Trump ordenó la imposición de un arancel del 25 % a los productos colombianos, además de sanciones migratorias y restricciones de viaje. Ante esta decisión, Petro respondió con medidas similares.
Dado que Estados Unidos es el principal socio comercial de Colombia, las sanciones generaron preocupación en distintos sectores del país. En paralelo, el gobierno colombiano organizó vuelos de la Fuerza Aeroespacial Colombiana (FAC) para repatriar a los connacionales. En total, 306 colombianos han sido retornados en los últimos días, incluidos 42 menores de edad.
Críticas a la criminalización de los migrantes
Petro también cuestionó la manera en la que las autoridades estadounidenses han calificado a los deportados. “¿De dónde acá el señor Trump le va a decir a 42 niños colombianos que son delincuentes?”, preguntó.
Al respecto, advirtió sobre el riesgo de generalizar la criminalidad dentro de ciertos grupos poblacionales. “De la misma manera que se lo dijo a 42 niños, se lo dirá a centenares de miles, que son delincuentes, es lo que pensaban en 1943”, afirmó.
De igual manera, señaló que la justicia debe aplicarse de manera individual y no de forma colectiva. “Eso, la humanidad, en su sabiduría, lo había superado (…) No se pueden criminalizar grupos, colectivos; la criminalización es individual, el que causa un delito, se le juzga, pero no al grupo”, indicó.
Asimismo, se refirió a la situación de las minorías en Estados Unidos. “Todo el que sea latinoamericano, indígena, negro, va a ser tratado de delincuente. Se llama de colectivizar el crimen, se lo inventó (Adolf) Hitler”, concluyó.
Impacto en la política exterior colombiana
En su discurso, Petro afirmó que Colombia enfrentará retos en su política exterior debido a cambios en el contexto internacional.
“En el caso de las relaciones exteriores de Colombia, ni más ni menos vemos que lo que va a haber son dificultades. Es un mundo que entra en una fase de cambios profundos”, expresó.
Además, destacó la importancia de la cooperación latinoamericana frente a estos desafíos y la necesidad de fortalecer la democracia en la región.
“Quienes peleamos por un mundo mejor debemos ponernos las botas y formar un ejército de la vida, una humanidad unida, una Latinoamérica unida, un grupo que sepa defender la democracia y la libertad”, sostuvo.
Por último, Petro encomendó a la nueva canciller Laura Sarabia la tarea de representar la posición de Colombia en el ámbito internacional. Pues a sus 30 años, Sarabia se convierte en la ministra de Relaciones Exteriores más joven en la historia del país.