Deportaciones masivas propuestas por Trump tendrían costos exorbitantes para Estados Unidos, revela estudio

El American Immigration Council (AIC) advirtió en su más reciente informe que el plan de deportaciones masivas propuesto por el candidato republicano Donald Trump, en caso de ser elegido nuevamente presidente, no solo afectaría a la comunidad indocumentada, sino que tendría graves consecuencias económicas y sociales para todo Estados Unidos.

De acuerdo con el AIC, un organismo de estudio creado por la Asociación Americana de Abogados de Inmigración (AILA), cuyo propósito es desarrollar políticas y prácticas migratorias a través de programas innovadores y esfuerzos legales estratégicos basados en evidencia, compasión y equidad, el plan de Trump representa una amenaza significativa.

“Se detendrá la invasión. Los vuelos de inmigrantes terminarán y la aplicación de Kamala para inmigrantes ilegales se cerrará de inmediato en 24 horas”, declaró Trump durante un mitin en Colorado el pasado viernes, prometiendo aplicar una ley de 1798 para expulsar a personas provenientes de países que, según él, han invadido Estados Unidos.

Según el informe titulado “Deportación Masiva: costos devastadores para Estados Unidos, su presupuesto y su economía”, la propuesta de Trump afectaría a aproximadamente 13.3 millones de inmigrantes que carecen de estatus legal. El estudio detalla que ejecutar una operación de esta magnitud tendría un costo mínimo de 315,000 millones de dólares. No obstante, el AIC subraya que esta cifra es sólo una estimación preliminar y conservadora, pues los gastos a largo plazo serían significativamente mayores.

Al respecto, el informe resalta que, además de los costos directos de deportación, el gobierno también tendría que asumir los gastos relacionados con la detención masiva, el cumplimiento de los procedimientos legales y la participación de las autoridades estatales y locales. Según el análisis, “Estados Unidos necesitaría aumentar 24 veces la capacidad actual de detención del ICE y construir más de 1,000 nuevas salas de tribunales de inmigración”.

Por otra parte, el informe también menciona que figuras como Tom Homan, exdirector del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), han respaldado la implementación de una operación de deportación masiva bajo una nueva administración republicana. Homan es coautor del Proyecto 2025, un documento que ha sido criticado por su enfoque extremo en políticas de inmigración, y aunque Trump ha intentado distanciarse de dicho proyecto, sus promesas de campaña guardan muchas similitudes con las propuestas allí expuestas.

Como resultado de la magnitud de este plan, el AIC cuestiona la viabilidad de llevar a cabo una deportación masiva que implique la expulsión de millones de personas en un corto periodo de tiempo. El estudio detalla que “incluso una operación prolongada, con una meta de un millón de deportaciones por año, tendría un costo anual de 88,000 millones de dólares, acumulando un total de casi un billón de dólares en una década”.

Además, el informe señala que cualquier propuesta de este tipo tendría efectos colaterales incalculables, pues los costos no se limitan solo a las deportaciones, sino también al establecimiento de nuevos centros de detención y tribunales, y la contratación de miles de nuevos agentes para ejecutar estos arrestos y deportaciones. 

Sin embargo, el AIC aclara que los cálculos actuales “no incluyen los costos de ampliación de la infraestructura de deportación ni las inversiones adicionales necesarias para sostener una operación de esta envergadura”.