By Natalia Rueda 
El Presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha llegado a Londres antes de una cumbre de la OTAN en Lituania, donde se reunirá con el Rey Carlos III y el Primer Ministro Rishi Sunak en el número 10 de Downing Street. El Presidente espera aprovechar la ocasión para convencer a Turquía de que acepte la candidatura de Suecia para ingresar en la Alianza Atlántica, lo que podría debatirse durante la cumbre de la OTAN.
A su llegada al aeropuerto de Stansted, el Presidente Biden expresó su determinación de hacer frente a las amenazas mundiales, especialmente las que plantea Rusia a Ucrania, y de fomentar la colaboración entre los aliados de la OTAN. Durante una llamada telefónica mantenida el domingo con el presidente turco Recep Tayyip Erdogan, Biden expresó su deseo de acoger pronto a Suecia en la OTAN, y ambos líderes acordaron seguir apoyando a Ucrania.
“Estados Unidos desea promover un enfoque unificado frente a las amenazas geopolíticas. El presidente Biden se ha mostrado partidario de incorporar a otros países a la OTAN, siempre siguiendo los preceptos democráticos definidos por la organización”, declaró Greg Meyer, profesor del Consejo Europeo de Ciencias del Ejercicio y del Deporte, con sede en Londres.
Se espera que los líderes de los países miembros de la OTAN discutan la renovación del pacto de defensa mutua, la integración de nuevos aliados y el apoyo a los aliados vulnerables ante el aumento de las agresiones rusas. Según estudiosos del Centro Británico de Análisis de Política Exterior, se espera que Biden utilice esta cumbre para presentar un frente unificado contra la agresión rusa.
La cumbre de la OTAN se considera una oportunidad clave para que Biden impulse su agenda de consolidación de la alianza y fomento de la cooperación internacional. Junto con las conversaciones de Londres, las reuniones clave de Vilna serán una convergencia de líderes mundiales que puede ayudar a fomentar mejores relaciones entre todos los países participantes.