By Natalia Rueda 
El Grupo Adani, uno de los mayores y más influyentes conglomerados empresariales de la India, está en el centro de un creciente escándalo que ha impactado a los mercados financieros mundiales. El fundador y presidente del grupo, Gautam Adani, junto con su sobrino y seis altos ejecutivos, han sido acusados de soborno por las autoridades estadounidenses. Esta última batalla legal ha ensombrecido el extenso imperio del grupo, que incluye activos en puertos, energía e infraestructuras, y está planteando interrogantes sobre la corrupción en el panorama empresarial y político de la India.
La Fiscalía de Nueva York ha presentado cargos en los que se afirma que el Grupo Adani entregó sobornos por más de 250 millones de dólares a funcionarios gubernamentales de India con el fin de garantizar contratos altamente rentables en el sector de la energía solar. Grupo Adani ha negado todas las acusaciones.
Las acciones del Grupo Adani, que ya estaban bajo presión tras anteriores acusaciones de fraude, se desplomaron tras conocerse las acusaciones. Adani Enterprises experimentó un asombroso descenso del 22,61%, mientras que Adani Ports cayó un 13,57% y Adani Energy se desplomó un 20%. Los inversores han expresado su preocupación por las perspectivas de futuro del grupo, sobre todo porque la batalla legal amenaza con empañar su reputación y obstaculizar sus ambiciones en sectores clave, como las energías renovables.
Impacto internacional
La acusación también ha sacudido las relaciones internacionales. El Presidente de Kenia, William Ruto, canceló dos importantes acuerdos con el Grupo Adani: la ampliación del principal aeropuerto de Nairobi y un acuerdo multimillonario para la construcción de líneas eléctricas.