El tranquilo barrio madrileño de Carabanchel se ha visto sacudido por un macabro crimen que se ha cobrado la vida de una mujer de 25 años y su hija de 5 en la madrugada del lunes. La Policía ha detenido a la ex pareja de la víctima identificado como Jhoel Antonio como presunto autor del asesinato, que se investiga como caso de violencia de género.
Los vecinos fueron despertados por el sonido de fuertes gritos procedentes del domicilio de la víctima y rápidamente alertaron a las autoridades, que llegaron y encontraron a la mujer en estado crítico y con heridas por todo el cuerpo. La mujer logro decirle a las autoridades que su ex pareja también estaba agrediendo a su hija.
En el interior de la vivienda, la policía encontró a la niña con heridas graves en el cuello y al sospechoso, un hombre de 26 años con heridas de arma blanca que después de cometer su crimen, intento quitarse la vida. El hombre Fue trasladado al hospital en estado crítico. A pesar de los esfuerzos de los equipos médicos de emergencia, tanto la madre como la hija fueron declaradas muertas en el lugar de los hechos.
Antecedentes de violencia
Al parecer, la víctima había presentado una denuncia contra su expareja en 2020 y recibía medidas de protección a través del Sistema Integral de Protección a las Víctimas de Violencia de Género (VioGén). Sin embargo, estas medidas fueron levantadas tras la absolución del sospechoso en un caso anterior de maltratos. El sospechoso tenía antecedentes por amenazar a la víctima, pero sin una orden de alejamiento en vigor, la víctima quedó vulnerable ante su maltratador.
El trágico incidente ha suscitado dudas sobre la idoneidad de las medidas de protección para las víctimas de violencia de género. La víctima se convierte en el caso numero 53 de violencia de genero en lo que va del año en España y aunque el caso había sido considerado de alto riesgo por la policía, el sospechoso fue absuelto.
El hecho de que este crimen se produjera a pesar de los intentos de la víctima de buscar ayuda y protección pone de manifiesto la urgente necesidad de mejorar el apoyo y la aplicación de medidas de protección para las víctimas de violencia de género en España. El gobierno debe tomar medidas decisivas para evitar que vuelvan a producirse asesinatos sin sentido como éste.
Mientras las autoridades siguen investigando la secuencia de los hechos, una cosa está clara: se trató de un horrible acto de violencia machista. El hecho de que el agresor pudiera llevar a cabo un crimen tan atroz a pesar de tener antecedentes de malos tratos es una muestra flagrante de los fallos sistémicos en la protección de las víctimas y en la exigencia de responsabilidades a los agresores.
Con información de La Vanguardia