By Natalia Rueda 
El coronel Carlos Feria Buitrago, jefe de la protección presidencial en Colombia, fue citado a declarar ante la Fiscalía General de la Nación la mañana de este martes en la averiguación previa en curso por la muerte del coronel Óscar Dávila. Si bien su abogado expresó su fe en la búsqueda de justicia, la investigación también planteó preguntas difíciles sobre el presunto uso del aparato estatal de investigación en el caso.
El coronel Dávila se desempeñaba como coordinador de protección anticipada de la Presidencia de la República y su cuerpo fue encontrado sin vida por su chofer la noche del viernes 9 de junio al interior de su camioneta en el occidente de Bogotá. Se cree que el Coronel Feria estaba al tanto de cualquier posible presión o intimidación contra Dávila, y se comprometió a revelar todo lo que sabe.
El Coronel Feria es una figura de confianza en el gobierno colombiano, habiendo servido como protección presidencial desde el mandato del presidente Gustavo Petro como alcalde de Bogotá (2012-2014). La dedicación de Feria a brindar protección al presidente y su familia le valió una excepción en el rol de seguridad presidencial, generalmente otorgado a oficiales de mayor rango. También es un experto en inteligencia, lo que genera sospechas sobre el uso del aparato de investigación del Estado en lo que algunos han catalogado como un allanamiento de morada o un asunto de seguridad nacional.
La Fiscalía cree que el presunto uso ilegal de una prueba de polígrafo a Marelbys Meza, ex niñera de uno de los exjefes de Gabinete de Petro, es responsabilidad del coronel Feria y ha abierto dos líneas de investigación diferentes por los delitos de abuso de autoridad y malversación.
Mientras continúa la investigación, el público colombiano espera respuestas sobre cómo y por qué fue asesinado el coronel Óscar Dávila y si el coronel Feria tenía conocimiento de los hechos que condujeron a su muerte.