El presidente de la Reserva Federal de los Estados Unidos, Jerome Powell habló sobre la economía del país durante un foro sobre negocios, gobierno y sociedad en Stanford Graduate School of Business este 3 de abril. Afirmó que la economía pudo crecer un 3% debido a la fuerza laboral que llega gracias a los inmigrantes, que además ha ayudado con la reducción de inflación. Esto se ve reflejado en los últimos cambios que desafiaron los pronósticos de una recesión. Aunque reitera que su rol no se trata de influir en las políticas de inmigración, que simplemente analiza la evidencia desde una perspectiva económica.
En medio de la incertidumbre económica mundial, surge un análisis revelador que desafía las expectativas convencionales sobre la inflación. Powell considera que la estabilidad de precios podría restaurarse sin consecuencias catastróficas en el empleo. Lo cree así debido a las particularidades de la inflación actual en EE.UU. que muestran una clara divergencia con crisis económicas anteriores. Destaca la influencia de factores más allá de la demanda, como la escasez de semiconductores que se sufrió y conllevó a complicaciones en la industria automotriz. Así mismo resalta el papel clave de la recuperación del lado de la oferta en la reducción de la inflación.
En una entrevista con 60 minutes, declaró que hubo dos importantes factores que estabilizaron el mercado laboral en el último año y medio. Por un lado, el reintegro de los empleados a sus trabajos. En consecuencia, de la pandemia del COVID-19 muchas personas se negaron a volver a sus empleos, situación que cambió en el transcurso de 2023. En este año, también se vio un aumento de inmigración, llegando a un nivel que Powell denomina como “lo normal” previo a la pandemia. Dice que los inmigrantes brindan una alta taza de trabajadores para la fuerza laboral, incluso mayor que los mismos americanos. Esto se debe en parte a que las personas que ingresan suelen ser jóvenes o adultos jóvenes.