Tras el allanamiento de la embajada mexicana por parte de un equipo de la Policía Nacional de Ecuador, el país se ha enfrentado al escrutinio público. Se ha cuestionado la capacidad y conocimiento legal del presidente ecuatoriano Daniel Noboa y el gobierno que lo respalda. Resaltando que este acto es un grave precedente de la justicia del país, especialmente porque al hacerlo rompieron varios acuerdos internacionales: Convención de Viena de 1961 y Convención Americana sobre el Asilo Diplomático. Países como Estados Unidos y Canadá se han pronunciado al respecto de manera opositora a Ecuador. Aun así, el presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que estos países no estaban condenando las acciones de Ecuador.
Durante una conferencia de prensa el presidente Obrador reiteró su rechazo frente al acto cometido por el gobierno de Ecuador. Señaló que la soberanía de las embajadas en territorios extranjeros debía ser respetada al igual que el derecho de asilo, de lo contrario se incumple con los derechos internacionales. Dice que se llevará el caso frente a la Corte de Justicia Internacional donde de impondrá una denuncia. En adición se mostraron grabaciones exclusivas del allanamiento tomadas desde el interior de la embajada mexicana. En estas se observa cómo entran los agentes al recinto y cómo el jefe de cancillería, Roberto Canseco, se esforzó por impedirles el ingreso, frente a lo cual fue amenazado con un arma de fuego y movido a la fuerza del camino. Aun así, Canseco continuó su intento de defensa y reclamo incluso después de que aprendieran al asilado Glas. Lo que conllevó a su sometimiento por parte de otro agente, quien lo tiró al suelo hasta arrodillarlo.
“Nosotros somos juaristas, nada por la fuerza. Todo por la razón y el derecho. […] Eso para los hermanos ecuatorianos. […] Nosotros no somos iguales, nosotros no somos autoritarios no somos fachos. No pensamos que los problemas se resuelvan con el uso de la fuerza, nosotros somos pacifistas y siempre lo vamos a ser“.
Presidente Andrés Manuel López Obrador
Por otro lado, el presidente Obrador expresó su disgusto hacia las supuestas declaraciones realizadas por el Departamento de Estado de EE.UU., criticándola de presentar una postura “indefinida” que no condenaba lo sucedido. Sin embargo, este comunicado oficial emitido el 6 de abril precisa:
“Los Estados Unidos condenan cualquier tipo de violación de los Acuerdos de Viena en Relaciones Diplomáticas y toma muy seriamente la obligación del país hospedante para respetar la ley internacional que ampara las misiones diplomáticas.
México y Ecuador son aliados cruciales para los Estados Unidos y valoramos fuertemente nuestras relaciones con ambos países. Incitamos a ambos países a que resuelvan sus diferencias a respetando las normas internacionales”.
Departamento de Estado de EE.UU
Esto fue complementado con la declaración de Jake Sullivan, consejero de seguridad nacional de EE.UU., este 10 de abril. Quien reiteró la condena del comunicado original y agregó la oposición hacia los actos de violencia cometidos.
En el caso de Canadá el presidente Obrador se molestó específicamente por el uso de la palabra “presunta” cuando este país se refirió al quebrantamiento de los acuerdos de Viena. Lo cual se ve reflejado en esta publicación de X
Después de la conferencia de prensa del presidente Obrador, Canadá emitió un comunicado oficial el 11 de abril. Donde señala que tras revisar la evidencia (grabaciones exclusivas) presentada durante la conferencia de prensa de México, se confirmaba que el allanamiento era una clara violación de la Convención de Viena de 1961 sobre Relaciones Diplomáticas. Por lo cual el día 10 de abril Canadá tuvo una reunión de emergencia con Estados Unidos para condenar las acciones realizadas por Ecuador.