By Natalia Rueda 
Mientras se asienta el polvo de las elecciones nacionales en Argentina, el país se prepara para una segunda vuelta presidencial muy esperada que promete marcar su futuro. Con el 84,60% de los votos escrutados, el enfrentamiento será entre el tradicional candidato peronista Sergio Massa y el disruptor populista Javier Milei.
Los resultados de esta primera vuelta han conmocionado a la clase política, reflejando las profundas divisiones de la sociedad argentina. Por un lado, Massa, candidato del partido Unión por la Patria, se ha erigido en favorito con el 36,19% de los votos. Con una trayectoria en la política tradicional, Massa ha prometido restaurar la estabilidad y el crecimiento económico en un país que lleva años lidiando con una grave crisis económica.
Por otro lado, Milei, una figura relativamente desconocida en la política argentina, ha arrasado con su plataforma ultraliberal y antisistema. Obtuvo el 30,27% de los votos como candidato de La Libertad Avanza, partido que fundó pocos meses antes de las elecciones. Con su encendida retórica y sus políticas poco ortodoxas, Milei ha captado la atención de los votantes desencantados y cansados de la política tradicional, que no ha conseguido cambios tangibles.
La crisis económica del país ha sido un tema clave durante toda la campaña, y ambos candidatos han ofrecido distintos enfoques para afrontarla. Massa ha prometido aplicar una combinación de intervención estatal e inversión en industrias clave, propone aumentar las exportaciones para 2024, lo que permitiría reconstruir las reservas y alcanzar el equilibrio fiscal. Mientras que el plan de Milei prevé la liquidación del Banco Central, el cierre de la entidad y la completa dolarización de la economía en un plazo de 9 a 24 meses.
Mientras Argentina se prepara para la ronda final de las elecciones presidenciales del 19 de noviembre, el marcado contraste entre Massa y Milei suscitará sin duda acalorados debates y animará a sus respectivos partidarios. Muchos esperan que esta segunda vuelta aporte la claridad necesaria y un camino claro para el país.
Con información de Euronews