Bernardo Torres
Chilpancingo, Guerrero.- Maestros de cinco municipios que conforman el Sector Sierra se manifestaron en Chilpancingo, en demanda de garantías de seguridad, luego de los recientes hechos de violencia en el Corredor Xochipala-Filo de Caballos-Tlacotepec.
Más de 100 docentes provenientes de los municipios de San Miguel Totolapan, Heliodoro Castillo, Leonardo Bravo, Eduardo Neri y Chilpancingo, tomaron la Delegación de Servicios Educativos de la Región Centro, y bloquearon la avenida Vicente Guerrero de esta capital.
La demanda, se da luego del ataque en contra de una unidad del transporte público, en el tramo Xochipala-Filo de Caballos, a la altura del poblado de Tres Cruce, donde una maestra de Telesecundaria resultó herida, y días después perdió la vida.
Luis Mariano Nava, representante de este sector, dijo que son alrededor de 700 docentes distribuidos en comunidades de los cinco municipios que están sin clases desde el pasado 06 de marzo, y que a raíz de la inseguridad han dejado a unos 10 mil alumnos sin clases.
Señaló que a pesar del problema de inseguridad que no se ha atendido en la región y está presionando a los maestros a que suban y cumplan con esta última semana de clases, sin ninguna certeza de seguridad para su integridad física.
“Como ustedes saben, ya hubo un deceso, y aunque no fue un ataque directo contra el magisterio, quedamos en el fuego cruzado y en ese sentido estamos pidiendo respeto a nuestra integridad física, y si ellos garantizan, subimos sin problema”, precisó.
El representante, dijo que hay una negativa por parte de las autoridades educativas de atender su demanda, a pesar de que hay maestros y maestras que viajan acompañados de sus hijos a comunidades lejanas, algunas del municipio San Miguel Totolapan.
Explicó que los problemas de inseguridad no son en sus comunidades, pues llegando allá no pasa nada, el problema es precisamente el corredor de Xochipala-Filo de Caballos y la ruta hacia Tlacotepec, donde son bajados de las unidades del transporte público y les revisan sus cosas.
Hasta la fecha del ataque, dijo que los maestros no habían suspendido labores, y subían a sus comunidades a pesar del riesgo, pero tras el asesinato de la maestra, están temerosos de transitar por esa carretera, y esperan que a la brevedad posible sea atendida por las autoridades.