Colombia es un país donde los actos de violencia forman parte de las noticias diarias. Sin embargo, el reciente caso de Jack Ramírez Comas, un ingeniero mecánico de 23 años que recibió un disparo mortal en la cabeza durante un atraco callejero, ha dejado a la comunidad conmocionada y clamando justicia.
La noche del 1 de noviembre Jack y su novia se encontraban estacionados en el barrio de Las Mercedes cuando su coche fue golpeado por detrás por otro vehículo. Cuando Jack se bajó para inspeccionar los daños, dos hombres se acercaron y uno de ellos le disparó en la cabeza antes de huir del lugar con su coche.
La muerte de Jack ha provocado la indignación de la comunidad y un llamamiento a la justicia. La Policía Nacional ha abierto una investigación y se ha ofrecido una recompensa de hasta 50 millones de pesos por información que conduzca a la identificación y captura de los criminales. La Alcaldía Distrital también ha expresado su voluntad de cooperar con la policía para garantizar que los autores sean llevados ante la justicia.
Colombia lleva mucho tiempo luchando contra los robos callejeros, y muchos incidentes acaban en violencia. Sin embargo, la muerte de Jack Ramírez Comas ha encendido un clamor por medidas de seguridad más estrictas y castigos más severos para los delincuentes. Los habitantes de Barranquilla ya no están dispuestos a aceptar crímenes tan atroces como algo normal de la vida cotidiana.
Aumenta el robo de vehículos en Barranquilla
El asesinato de Jack Ramírez Comas es un trágico recordatorio del alto impacto del hurto de vehículos en Barranquilla. Según cifras de la Policía Metropolitana, este año se han denunciado 372 casos de robo de coches en Barranquilla y el área metropolitana circundante. Sorprendentemente, sólo el 35% de estos vehículos robados han sido recuperados y devueltos a sus legítimos propietarios. Esto significa que la mayoría de las víctimas no sólo han perdido su medio de transporte, sino también su sensación de seguridad.
A comparación de año pasado, 379 vehículos fueron robados en la ciudad. Lo que significa que este año se superará esa cifra, teniendo en cuenta que aún quedan dos meses para que acabe el año.
Es hora de que las autoridades tomen medidas y hagan las calles más seguras para todos. Los habitantes de Barranquilla exigen justicia para Jack Ramírez Comas y el fin de la violencia que asola su ciudad. Es hora de un cambio, y es hora de que el gobierno actúe.
Con información de Vanguardia y El Heraldo